En el 2012, 319 menores perdieron la vida en las carreteras, de los cuales 37 tuvieron lugar en España, según cifras de la DGT.
Todos sabemos que los niños deben viajar con su correspondiente Sistema de Retención Infantil, es decir, la clásica sillita. Pero en ocasiones no hay quien resuelva las dudas de los padres a la hora de comprarla o de montarla. Además, no hay que olvidar que podemos ser multados no solo por no llevarla, sino por tenerla mal instalada.
Un aspecto importante a tener en cuenta es que los menores que midan menos de 1,35 metros deben ir en sillitas colocadas en la parte trasera del vehículo. La estatura y el peso son los parámetros que determinan cual es la silla más adecuada para el niño, no así la edad.
Evidentemente las sillas de los bebés tienen unas características bien distintas a las sillas que deben de usar niños de más de 3 años, por ejemplo.
Hasta los 15 meses de edad los niños deben viajar a contramarcha, siendo muy seguro ya que, en caso de colisión, tanto la espalda, el cuello y la cabeza del niño están más protegidos.
Para saber si debemos de cambiar la silla tenemos que tener en cuenta si se le queda pequeña, la cabeza del niño no debe superar el respaldo, hay sillas con reposacabezas regulables, por lo que podemos ir adaptándolo hasta que llegue a su tope.
A la hora de comprar la silla debes de tener en cuenta lo siguiente:
Actualmente conviven dos normas de homologación, la ECE R44/04 y la ECE R129. La primera dejará paso a la segunda en 2018, quedando ésta última como única norma aplicable.
La primera norma divide las sillas por grupos y depende del peso del niño, mientras que la segunda indica la silla que hay que comprar según el rango de edades y la altura del niño.